XXX Jornadas de Pastoral del Trabajo: “El reto es humanizar las relaciones laborales”

Este fin de semana Ávila ha acogido el 30º aniversario de las Jornadas Generales de Pastoral del Trabajo. La Universidad de la Mística ha sido el lugar elegido para la celebración de este encuentro, que se ha desarrollado bajo el lema “El gran tema es el trabajo. A los 30 años de la aprobación del documento La pastoral obrera de toda la Iglesia”. 

Este encuentro de diálogo y reflexión ha reunido a una amplia representación de delegados de esta pastoral en todo el país, de movimientos especializados de la Iglesia, de obispos y de representantes de la Curia romana. En total, 185 participantes, de todas las diócesis de España, 27 delegados diocesanos de pastoral del trabajo, así como representantes de movimientos y equipos parroquiales.

Unas jornadas conmemorativas que buscaban dialogar y reflexionar sobre las tres décadas transcurridas desde la aprobación del documento “La pastoral obrera de toda la Iglesia”, que marcó un hito en la integración de la pastoral obrera en la tarea evangelizadora, en el corazón, de la Iglesia española. Un documento del que se daba gracias por el pasado y se expresó el aleluya por su futuro.

El Obispo de Ávila, Mons. Rico García, daba la bienvenida en la mañana del sábado a las personas asistentes a esta “tierra de santos y cantos”. En su alocución, Don Jesús animaba a los presentes a valorar la incidencia de esta pastoral concreta en el conjunto de la Iglesia y a identificar “los cambios” que se han producido en la últimas tres décadas en el mundo obrero y del trabajo.”

Por su parte, el obispo de Osma-Soria, Mons. Abilio Martínez Varea (obispo responsable de la Pastoral del Trabajo) quiso destacar la importancia de estas jornadas para seguir impulsando, renovando y reorganizando la pastoral obrera en las diócesis, parroquias y comunidades para atender especialmente el drama de la siniestralidad laboral, la precarización de las condiciones de trabajo que afectan especialmente a la población migrante y contribuyendo, en línea con el llamamiento del papa Francisco a humanizar el trabajo ante el avance de la tecnología y el economicismo.

CCOO destaca la defensa cristiana de la centralidad del trabajo

Entre todas las ponencias que se llevaban a cabo este fin de semana, destacamos la del secretario general de CCOO, Unai Sordo, quien en su intervención resaltó el valor del compromiso cristiano por defender la centralidad del trabajo. “Los movimientos cristianos, con esta visión social desde la Iglesia, nunca habéis perdido el discurso de la centralidad del trabajo en las sociedades”, ha reconocido Sordo, quien ha explicado que la concepción del trabajo decente es toda una “apuesta política, desde instancias democráticas e institucionales” en coherencia con “la dignidad de las personas y de la clase trabajadora como colectivo”.

En este sentido, ha alabado “el compromiso cristiano por fomentar la comunidad, el sentido crítico y un horizonte compartido en que nos salvamos con el colectivo”, por lo que ha asegurado que existen entre su organización y el resto de organizaciones sindicales muchos espacios en común con la pastoral del trabajo.

De hecho, ha planteado que ante el cambio antropológico del neoliberalismo cultural, donde “las mayorías sociales se entienden como individuos aislados” que se relacionan en función de “la meritocracia”, uno de los grandes retos es “dotarnos de vertebración y organización comunitaria”.

“Tiene gran valor empeñarse en la construcción de espacios de comunidad sea en el sindicato, en la iglesia, en el barrio, en la asociación de vecinos o en los partidos…”, ha afirmado Sordo. Incluso, ha reconocido la importancia, más en una época en la que avanza “la ola reaccionaria”, “el nihilismo” y “el narcisismo tirano”, de cultivar el sentido de “trascendencia”, sea desde la fe o desde otros elementos morales y éticos.

Precisamente, para encontrar sentido en el horizonte y recuperar la fuerza movilizadora de la utopía, en su opinión, hace falta comprender el concepto de “límite” y el hecho de que “estamos aquí porque otros estuvieron antes y otros estarán después”, lo que en su opinión tiene un gran componente espiritual que merece ser tenido en cuenta.