Sacerdotes mártires abulenses, en la memoria y la oración

La Iglesia española celebra hoy la memoria de los mártires, que fueron objeto de la persecución religiosa en el siglo XX. Son un grupo innumerable, en torno a 2000 beatos y santos (obispos, sacerdotes, religiosos, laicos, hombres y mujeres) de distintas congregaciones y diócesis españolas a los que se celebra conjuntamente en este día.

La Iglesia de Ávila celebra la memoria de cinco beatos que recibieron la palma del martirio en la provincia abulense. Son los siguientes:

  • José Máximo Moro Briz, Santibáñez de Béjar (Salamanca); párroco de Cebreros, martirizado en El Tiemblo el 24 de julio de 1936.
  • José García Librán, Herreruela (Toledo); párroco de Gavilanes, martirizado en Pedro Bernardo el 14 de agosto de 1936.
  • Juan Mesonero Huerta, Rágama (Salamanca); párroco de El Hornillo, martirizado en Arenas de San Pedro el 15 de agosto de 1936.
  • Damián Gómez Jiménez, Solana de Rioalmar (Ávila); párroco de Mombeltrán, martirizado en el Puerto el Pico el 19 de agosto de 1936.
  • Agustín Bermejo Miranda, Puerto Castilla (Ávila); párroco de El Hoyo de Pinares, martirizado en El Barraco el 28 de agosto de 1936.

Los restos de todos ellos se encuentran al culto en la Catedral de Ávila. Que sean ejemplo vivo de la entrega sin condiciones a una vida con Cristo y para Cristo.