Todo un detalle. Nuestro obispo emérito, Mons. García Burillo, acaba de recibir una de las misivas más emocionantes que podría imaginar. De su propio puño y letra, el Papa Francisco le ha dirigido unas palabras ante su próxima salida de la diócesis de Ciudad Rodrigo, de la que ha venido ejerciendo como Administrador Apostólico.
Como informa la web de la diócesis civitatense, el Pontífice agradece su labor allí, “y todo el bien que ha hecho”. Hay que recordar que don Jesús recaló en tierras salmantinas tan sólo un mes después de haberse jubilado como Obispo de Ávila, por lo que el Santo Padre bromea con el hecho de que después de haber pasado por la diócesis abulense y ahora por Ciudad Rodrigo, “como dice el refrán, no hay dos sin tres así que después de Ávila y Ciudad Rodrigo es posible que venga la tercera”.
De igual modo, le pide que no deje de rezar por él, algo que el Santo Padre hace también por todos nosotros.
Esta es la carta completa: