El derecho a la libertad religiosa está en caída libre. El 67% de la población mundial, 5.200 millones de personas, viven en países donde se producen graves violaciones a la libertad religiosa, lo que supone que pueden ser discriminados, marginados o perseguidos por causa de su fe.
Son datos del último Informe de Libertad Religiosa en el Mundo 2021 que cada dos años realiza la fundación de la Santa Sede, Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN). El lunes 21 de junio será presentado en Ávila en un acto que comenzará a las 19 hs en el Cine Tomás Luis de Victoria. Contará con la participación de Mons. José María Gil Tamayo, Obispo de Ávila, y la Responsable del Dpto. de Comunicación de ACN, Raquel Martín. Se guardarán escrupulosamente las medidas COVID19 en el acceso al recinto, que cuenta con entrada libre hasta completar el aforo previsto en la actual situación sociosanitaria.
Esta presentación está dirigida a cualquier persona –creyente o no- que desee conocer y profundizar en la libertad de este derecho fundamental, imprescindible para la dignidad humana y el desarrollo próspero de las sociedades.
Un informe único
Se trata del único estudio realizado por una institución católica que analiza el cumplimiento o respeto de este derecho humano en todos los países del mundo (196) y abarca todas las religiones. Es también el único disponible en seis idiomas. El Informe de Libertad Religiosa en el Mundo se publica desde 1999 y es presentado a nivel internacional en las 23 oficinas que tiene la fundación ACN en todo el mundo.
Ayuda a la Iglesia Necesitada quiere subrayar con el informe el valor de la libertad religiosa como derecho fundamental (Art. 18 Declaración Universal de los DDHH) y alertar sobre su grave retroceso en muchos países del mundo.
La religión es motivo de discriminación, marginación y persecución de millones de personas pertenecientes a todos los credos. Por ello, con este informe ACN quiere sensibilizar sobre la necesidad de su protección y defensa. En aquellos países donde la libertad religiosa está garantizada, se establecen las bases para una coexistencia verdaderamente humana, tal y como pide el Papa Francisco.
Novedades
Este informe aporta un mapa en el que se clasifican países en función de sus niveles de discriminación y persecución religiosa. Por primera vez, incluye 6 análisis regionales en los que se han dividido los 196 países, que dan conclusiones relevantes sobre el cumplimiento o la vulneración de este derecho fundamental.
Otra de las novedades de este ILR 2021 es la categorización de países en el grupo “bajo observación” donde se incluyen aquellos en los que el estado de la libertad religiosa empieza a ser amenazante.
Una de las principales conclusiones que arroja este último ILR destaca la radicalización del continente africano, especialmente en el África subsahariana donde se ha producido un fuerte incremento de la presencia de los grupos yihadistas en alianza con decenas de grupos violentos locales. Burkina Faso y Mozambique son dos exponentes de lo sucedido. En el 42% de los países africanos se ataca ya la libertad religiosa.
La pandemia del COVID-19 ha tenido profundas implicaciones para los derechos humanos en todos los países del mundo. Para la libertad religiosa, desgraciadamente también. Ante la magnitud de la emergencia, los gobiernos tuvieron que tomar medidas extraordinarias en algunos casos no exentas de abusos y ataques a derechos fundamentales.
Un total de 30 autores, expertos independientes y equipos de investigación en universidades y centros de estudios de distintos países han analizado durante los dos últimos años cada país del mundo siguiendo parámetros objetivos y una metodología precisa.
Impunidad
El director de ACN España, Javier Menéndez Ros, ha asegurado que “la libertad religiosa es un derecho humano en caída libre” y que ACN está muy preocupada por la violación “sistemática de la libertad religiosa” en 62 países del mundo.
Por su parte, la editora jefe del Informe de Libertad Religiosa, Marcela Szymanski, ha asegurado que el mapa mostrado “muestra la impunidad que impera, porque nadie hace nada. Todos los autores que violan este derecho necesitan acabar con la diversidad de pensamiento, conciencia y religión”.
“El hombre y la mujer que piensa, que busca la verdad y la trascendencia, es un obstáculo”, ha añadido.