La cuarentena ha hecho que muchas empresas e instituciones se reinventen y echen mano de las nuevas tecnologías para poder seguir llevando a cabo su actividad. También la Iglesia ha recurrido a estas opciones de comunicación a distancia para continuar su labor evangelizadora, pastoral, social, caritativa y de asistencia.
El último ejemplo lo encontramos este fin de semana. Con el inicio del mes de mayo, comenzaba el último curso de preparación al matrimonio, como estaba programado en el calendario de actividades del Secretariado de Familia y Vida de la Diócesis de Ávila. Con la entrada del Estado de Alarma, todo se paralizó, y las bodas se han pospuesto. Sin embargo, y dado que ya había varias parejas apuntadas a este curso (y alguna más se ha ido apuntando durante este tiempo de confinamiento), se decidió realizar esta formación de manera telemática.
“No queríamos suspender esta formación matrimonial al no poder hacerla de forma presencial, por lo que surgió la idea de darles la oportunidad de llevarlo a cabo de forma virtual. Algo así como un ‘telecurso de novios’, explica Raquel Toldos, responsable del Secretariado de Familia y Vida. De esta forma, se facilitaba que las parejas que lo precisaran tuvieran el certificado de haber realizado una formación mínima que asegurará la preparación básica para la celebración del Sacramento del matrimonio.
Este curso de preparación al matrimonio a distancia comenzó este fin de semana, con la participación de 8 parejas. Todas ellas han tenido que modificar su fecha de boda, algunas para final de año y casi todas para el año que viene.
El curso durará 4 semanas, aunque es adaptable al ritmo de cada pareja. La metodología que se aplica comprende una reunión inicial y final mediante videoconferencia, con todos los participantes. Una vez a la semana se les mandará por correo electrónico un tema diseñado especialmente para esta situación con los mismos contenidos que se explican en la forma presencial. Contenidos que van desde la vocación al matrimonio, psicología, sexualidad, espiritualidad, Sacramento y liturgia del matrimonio. Se incluye además material visual complementario, preguntas para la reflexión y un formulario de preguntas para su evaluación. Todo ello coordinado por un matrimonio y un sacerdote acompañarán a estas parejas durante el curso. Siempre a su disposición mediante teléfono o mail.