Las temperaturas prácticamente veraniegas de este domingo animaron a que la Ofrenda Grande en el Santuario diocesano de Nuestra Señora de Sonsoles tuviera una enorme participación de fieles. Las 15 localidades que componen la cofradía del Valle Amblés honraron a la que es patrona de estas tierras cercanas a la capital abulense, en una jornada que contó con la tradicional procesión por el recinto del Santuario, y el popular baile de la bandera, que este año protagonizaron tres vecinos de Duruelo.
La jornada comenzó con la celebración de la Eucaristía, presidida por Mons. Rico García, en la que es su primera visita oficial al Santuario diocesano de Sonsoles. De ahí que, al término de la misma, se acercara hasta la sacristía para firmar en el libro de honor del Patronato.