Este lunes comienza un nuevo Curso de Formación Permanente del Clero. que, al igual que los retiros y los ejercicios espirituales, son ayudas imprescindibles que ofrece la Iglesia para fortalecer la misión de nuestros presbíteros. Desde hace años, esta oferta formativa para los sacerdotes de la diócesis quiere situarse en el momento actual de nuestra Historia, tanto socio-cultural como eclesial. Y pretende ofrecer una ayuda para el cumplimiento de la misión evangelizadora en esta sociedad.
El programa de este año ayudará a reflexionar sobre la ley de educación LOMLOE desde la perspectiva de lo que puede aportar la asignatura de Religión a la educación integral de los alumnos; sobre la crisis económica y cómo afrontarla; no puede faltar tampoco la reflexión sobre el camino sinodal y su importancia para el ser de la Iglesia y su misión. Y otras cuestiones específicas sobre la vida ministerial o sobre la liturgia, entre otros.
Las sesiones serán cada lunes por la mañana en el Seminario Diocesano, concluyendo el mes de mayo con la fiesta de San Juan de Ávila, patrón del clero.
