Ávila reza por las vocaciones durante toda una semana

Este domingo 25 de abril, domingo del Buen Pastor, se celebraba también la Jornada Mundial por las Vocaciones y las Vocaciones Nativas, bajo el lema “¿Para quién soy yo?”.

Con este motivo, desde Pastoral Vocacional han organizado una serie de actividades para diseñar toda una semana de oración por las vocaciones. Comienzan hoy lunes, con una “maratón de oración” en los colegios. Cada día de la semana uno de los colegios comenzará el día orando por las vocaciones. Así, hoy lunes comienza el colegio diocesano Pablo VI, para dar el relevo el martes y el miércoles al colegio Milagrosa-Las Nieves (el martes en el edificio de Secundaria y Bachillerato, y el miércoles en el edificio de infantil y Primaria), el jueves al colegio diocesano Asunción de Nuestra Señora, y el viernes al colegio Santísimo Rosario (Mosén Rubí). También se unirá el colegio Amor de Dios (de Arévalo) y el de la Divina Pastora (de Arenas de San Pedro).

También está prevista la celebración de las “24h de oración por las vocaciones”. Desde las 10 de la mañana del jueves 29 hasta las 10 de la mañana del viernes 30, estarán orando por las vocaciones, en turnos de una hora, las diversas órdenes y congregaciones de nuestra diócesis. Por motivos de la pandemia lo hará cada comunidad en su casa. Eso sí, el último turno (de 9 a 10 del viernes 30), será en la capilla de las Nieves, en la calle Reyes Católicos, abierto a los fieles que quieran participar.

Por último, el viernes 30 se celebrará una Vigilia de oración por las vocaciones. Será en el ICM a las 20:15h, y estará presidida por nuestro obispo D. José María, y preparada por los seminaristas de nuestra diócesis.

¿Para quién soy yo?

La Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones y la Jornada de Vocaciones Nativas se celebran bajo el lema «¿Para quién soy yo?». Una llamada a reconocer para qué estamos hechos, qué sentido tiene nuestro paso por este mundo, qué proyecto tiene el Señor para cada uno de nosotros. Quiere que todos colaboremos en la construcción de su Reino, que cada uno, según la vocación a la que nos llama, testimoniemos con nuestra vida que él es el Señor.

Hoy la comunidad cristiana está llamada a orar al Señor de la mies para que mande obreros a su mies. Para que no falten en su Iglesia hombres y mujeres que respondiendo a su llamada hagan presentes en sus vidas el amor de Dios. Le pedimos al Señor que suscite entre nosotros vocaciones al sacerdocio y a la vida consagrada, que también surjan abundantes en los países de misión, que no les falten los medios necesarios para desarrollarse.