Un nuevo impulso al albergue de Cáritas

Firma del convenio entre Cáritas y el Ayuntamiento de Ávila

La cooperación entre instituciones es fundamental para el avance de la sociedad. Y muy especialmente, en la atención a los más vulnerables, un objetivo que debe ser compartido por todos. Esa colaboración se ha plasmado hoy, una vez más, en la renovación del convenio entre Ayuntamiento y Cáritas Diocesana de Ávila para el funcionamiento del Albergue Santa Teresa de Jesús. Un albergue donde pernoctaron en 2019 unas 3000 personas.

En total, el consistorio de la capital aportará 28 mil euros. Una importante ayuda “pero no cubre el total de los gastos del albergue”, destacaba el alcalde Jesús Manuel Sánchez Cabrera, que agradeció el esfuerzo de Cáritas en este sentido. “Es algo absolutamente impagable, ya que muchas familias de Ávila que habitualmente no tenían necesidades se han visto obligadas a socilitar ayuda debido a la situación de pandemia”.

“Sólo intentamos devolver a la sociedad abulense lo que nos da”, destacaba Antonio Luis Nicolás, delegado episcopal de Cáritas diocesana de Ávila. Una ayuda que, en definitiva, presta la propia Iglesia Católica, donde se enmarca la propia Cáritas. El sacerdote explicaba asimismo la triple acción que se realiza desde el albergue:

  • Por un lado, una cama para cuantos no tienen donde dormir o asearse cuando pasan de forma itinerante por Ávila.
  • Por otro, un comedor social, que tan sólo en 2019 llevó a cabo 10.658 actuaciones, repartidas en 2.654 desayunos; 4.215 comidas; y 3.789 cenas.
  • Y también el albergue gestiona el llamado Centro de Atención Integral (CAI). Un lugar donde se trabaja sobre todo con jóvenes inmigrantes que buscan reinsertarse de manera más estable. Un trabajo que se realiza a través de talleres y acciones de acompañamiento. Actualmente se presta servicio a cuatro jóvenes. “Tenemos tres venezolanos y un colombiano. Éste lleva seis meses y ahora ha encontrado trabajo y se ha independizado. Y los otros jóvenes están en diversos talleres de empleo, porque ahora hay bastante demanda para la atención social”.

El sacerdote destacaba también que, como era de esperar, en este 2020 variarán al alza la cifra de beneficiarios de este albergue por la crisis de la COVID-19. “Queremos hacer una valoración de los meses de marzo a junio, porque todo esto ha desestabilizado nuestros presupuestos. “La situación de vulnerabilidad es manifiesta y preocupante, y cada vez vamos a tener mayor demanda de cobertura social”.