Un cuarto de siglo. Este es el tiempo que lleva la congregación de las Esclavas Carmelitas de la Sagrada Familia en la diócesis de Ávila. Bajo el amparo del carisma y el impulso del Carmelo, trabajando en la pastoral con jóvenes, y en la vida ordinaria de parroquias como el Inmaculado Corazón de María, San Pedro Apóstol o San Pedro Bautista, la simpatía de las hermanas ha sido y es su mejor carta de presentación entre los fieles, que las profesan gran cariño y simpatía.
Y no podían haber cumplido mejor estos 25 años entre nosotros. En la Misa de acción de gracias por sus frutos pastorales en la Iglesia de Ávila (presidida por el obispo de Ávila y concelebrada por el obispo de Cuenca, Mons. Yanguas), tres jóvenes, Clara, Agostina y Raquel, se comprometían con la congregación, llevando a cabo la profesión temporal de sus votos. ¡Enhorabuena!
Gracias por ser luz y alegría para esta diócesis de Ávila en estos 25 años y en todos los que vendrán. Gracias por ser presencia viva de Cristo y por vuestro testimonio, que ha sido inspiración del camino vocacional de muchos jóvenes.