Mañana sábado, la basílica de La Santa acogerá la Eucaristía en honor al Niño Jesús de Praga, nua tradición carmelita de siglos, que en Ávila se había perdido durante algunos años y fue recuperada el pasado 2024. La celebración comenzará a las 13 horas, y al término de la Eucaristía se realizará una procesión claustral en la que los más pequeñosportarán la imagen del Niño Jesús de Praga.
La primera mención que se tiene del niño Jesús de Praga es de la segunda mitad del siglo XVI, en el que un fraile talló en España la imagen en cera. Esa imagen del niño Jesús fue llevada a Praga por la duquesa española María Manríquez de Lara. Esa estatua más tarde se la pasó a su hija como regalo de bodas y ella la veneraba y la tenía mucha devoción, pues le daba mucho consuelo en distintas ocasiones. Esta señora donó la estatua como regalo al convento de los Carmelitas descalzos de la Iglesia de Nuestra Señora de las Victorias en Praga. Y los Carmelitas la pusieron en capilla para que los frailes jóvenes aprendieran las virtudes del Niño Jesús. Los novicios recibían muy positivamente la estatua y rezaban cada día sus oraciones ante ella.
Desde entonces, el Niño Jesús de Praga es una tradición muy carmelitana. Por ejemplo, los novicios y los frailes le tenían mucho cariño y uno de los frailes escuchó un día rezando delante del Niño Jesús de Praga: «Cuanto más me honréis, más os favoreceré». Por eso siempre la veneración del Niño Jesús de Praga ha estado ligada a las vocaciones religiosas, al Carmelo y a distintos beneficios del Niño Jesús. En Praga existe la costumbre de cambiar al Niño con un montón de atuendos, de ropa que tiene, capas que le van cambiando dependiendo del tiempo litúrgico; algo parecido a como hacen en el Pilar. Le van cambiando de ropa, excepto la semana de Navidad: esa semana, el Niño está desnudito, vemos la imagen solo con la cera ,porque es símbolo y signo de la humanidad de Jesucristo.
Esta devoción se mantiene con fuerza no sólo en España. En Portugal, por ejemplo, hay un santuario enorme en su honor, y celebran su fiesta en junio. También se mantiene la iglesia de Santa María de la Victoria del Niño Jesús de Praga, en la que, por ejemplo, en el año 2006, el Papa Benedicto XVI abrió la visita apostólica a la República Checa, y le regaló una rosa de oro y una corona de oro al Niño Jesús de Praga.
Tradicionalmente, la fiesta del Niño Jesús de Praga se celebra el 25 de enero. Pero, como nos explica el Padre David, rector de la Basílica de La Santa, «aquí en Ávila lo hemos cambiado porque como ese día es la conversión de San Pablo y estamos en el novenario de la Unión de los Cristianos, no queremos solapar las fiestas. En nuestro Comento de la Santa siempre hubo una cofradía del Niño Jesús de Praga, por lo que muchos niños venían y eran devotos y veneraban al Niño Jesús de Praga». Por eso, en 2024 decidieron reciperar esta tradición que llevaba años sin realizarse en el convento abulense. Algo que fue muy bien acogido por muchas personas, que tenían el recuerdo de esta celebración cuando eran niños y habían sido de la cofradía.