La rueda de prensa del Día de la Iglesia Diocesana ha dado para mucho. Los periodistas han querido conocer también el parecer del Obispo de Ávila sobre el informe presentado por el Defensor del Pueblo sobre los abusos cometidos en el ámbito de la Iglesia.
Reconociendo que la encuesta demoscópica embarra el informe (así lo dijo el propio Defensor del Pueblo), Mons. Rico abogaba por “rescatar todo lo positivo que el informe tiene”. “Yo creo que el hecho de que a 487 víctimas haya escuchado tranquilamente el Defensor del Pueblo ya es algo positivo, ¿no?”, señalaba.
“Yo creo que el informe coloca el problema en un amplio contexto del abuso a menores en nuestra sociedad, invitando al reconocimiento y a la reparación y a la importancia de la prevención”, afirmaba el obispo. Asimismo, apuntaba que el propio informe deja claro “que esto no es un problema de un grupo, sino que es un problema global. Yo creo que lo más importante es haber colocado en el centro a las víctimas de un problema que es global, en la sociedad y serio”. Citaba, por ejemplo, que el mayor número de abusos se cometen en el ámbito familiar, pero tambien se dan en el sanitario (más de un 2%), en el ámbito de deporte y ocio … Señalaba también el hecho de que el estudio apunta que los abusos cometidos en instituciones de enseñanza religiosa suponen un 4,6%, y los cometidos en instituciones de enselanza no religiosa, un 9,6%.
“¿Que los abusos son sólo en los colegios religiosos? No, no, no. Es un problema serio. Y como problema serio, creo que la sociedad tiene que abordarlo, ver qué prevención puede haber, qué atención se debe prestar.
Recordó Don Jesús las múltiples ocasiones en las que la Iglesia ha pedido perdón por los abusos. La última, a través del presidente de la Conferencia Episcopal. Con que hubiese habido un caso ya es lamentable. Pero no olvidemos todo lo que ha avanzado la Iglesia. Ha hecho protocolos y están ya muy avanzados, así como la legislación canónica sobre el abordar esos abusos, atender a las víctimas, hablando de que es necesaria la reparación y por supuesto el acompañamiento de esas víctimas”.
Aterrizando en la Iglesia de Ávila, el informe recoge los datos que pidió a la diócesis. Entre ellos, que sólo ha habido una única intervención de procedimiento canónico sin haber existido procedimiento del sistema judicial(es decir, que no hay denuncia civil), correspondiente al intervalo del 1960-1979. Solamente un caso.
“Y el informe dice, hablando de las diócesis y en concreto señalando la de Ávila, que hemos mostrado un esfuerzo por conocer de manera completa los abusos sexuales ocurridos en la diócesis. Cuando nos pidió los datos el Defensor del Pueblo, él quedó muy satisfecho del informe tal como se le dio y lo que se colaboró con él”.