Este lunes, 2 de octubre, la Policía Nacional celebra la festividad de sus patrones, los Ángeles Custodios. Ellos son nuestros “guardaespaldas celestiales” y, por analogía, se puede aplicar perfectamente a este Cuerpo de la Seguridad del Estado.
La iglesia de San Pedro Apóstol acogía a primera hora de la mañana una Eucaristía, presidida por nuestro obispo D. Jesús, y participada por un gran número de fieles. No hay que olvidar que Ávila es sede de la Escuela Nacional de Policía, lugar donde se forman los futuros miembros de este Cuerpo: de ahí la amplia presencia de mandos policiales, alumnos de la Escuela, así como autoridades civiles y militares. Todos ellos han recordado junto con Mons. Rico (y el capellán de la Escuela, Mons. Eliseo Rubio) la importancia de la protección que nos brindan a nivel espiritual los Ángeles Custodios, y a nivel fáctico la propia Policía Nacional.