Hablar con el corazón. Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales

El próximo 21 de mayo, solemnidad de la Ascensión del Señor, se celebra la 57º Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales.  Un día en el que se proclama de nuevo el mandato del Señor: “Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación” (Mc. 16, 15). Este año, el lema elegido es “Hablar con el corazón, «en la verdad y en el amor» (Ef 4,15)”. Así lo explicaba el Papa Francisco en su mensaje para esta Jornada, que se hizo público en la fiesta de San Francisco de Sales, patrono de los periodistas y comunicadores. En él, el Santo Padre destaca como «uno de los ejemplos más luminosos» a este santo, doctor de la Iglesia. De él se podía decir que «las palabras dulces» multiplican los amigos y un lenguaje amable favorece las buenas relaciones.

Nuestra diócesis, siguiendo esta premisa, quiere entablar esas buenas relaciones y el necesario diálogo fructífero a través del nuevo areópago comunicativo que suponen las Redes Sociales e Internet en general. En Twitter (@diocesisdeavila) compartimos en un tú a tú con nuestros casi 6000 seguidores cómo se vive la fe en nuestra Iglesia más cercana. En Facebook (www.facebook.com/diocesisdeavila) ampliamos informaciones sobre la actualidad diocesana a nuestros casi 4000 “amigos”, así como tratamos de resolver las dudas de aquellos que se acercan hasta esta página buscando respuestas. Ambas opciones funcionan desde hace más de 14 años, y están suponiendo una experiencia muy enriquecedora en cuanto al contacto directo con el otro. Asimismo, de cara a la celebración del primer Año Jubilar Teresiano, disponemos de un perfil más en Twitter (@TeresaJubileo) donde publicamos todas las novedades respecto a esta singular celebración, así como cuestiones relacionadas con Santa Teresa y su impresionante legado espiritual.

Más allá de las redes sociales, la presencia de la diócesis de Ávila en Internet se completa con la sección de noticias de nuestra web. Y por supuesto, con nuestro canal de comunicación vía Whatsapp donde casi 1000 personas reciben las reflexiones del Evangelio cada domingo y tiempos fuertes del calendario litúrgico, así como las noticias de la diócesis en directo. Para recibir estas noticias en directo, simplemente debe pulsar en ESTE ENLACE y aceptar la invitación. 

Asimismo, este presente curso pastoral ha traído consigo una importante novedad comunicativa, y es que la Hoja Diocesana “Camino de Iglesia” ha dejado de editarse en papel para dar el salto definitivo a la comunicación digital. Una publicación que ahora se ofrece en formato quincenal, y que ofece al lector una experiencia completamente interactiva, pues además de los textos con las informaciones pertinentes de la actualidad diocesana, se suman ahora videos, audios e imágenes que completan esa información en 360º. Pese al temor inicial del cambio, la acogida de esta Hoja Diocesana digital está siendo muy positiva, contando ya con más de 500 suscriptores directos, y una lectura a través del móvil y la web de más de 800 visitas quincenales. Para recibir la Hoja Diocesana en el móvil, simplemente debe pulsar en ESTE ENLACE y aceptar la invitación.

Y no podemos olvidar nuestros cauces de comunicación tradicionales, como nuestros programas en la Cadena COPE: “El Espejo de Ávila” (viernes, a las 13:30 h), e “Iglesia Noticia en Ávila” (domingos, a las 9:45).

Materiales de la Jornada

 

«Solo la comunicación de la verdad permite avanzar la sociedad»

La Jornada de este año, explican en su mensaje los obispos de la Comisión Episcopal para las comunicaciones sociales, nos invita a hablar con el corazón, en la verdad y en el amor.  Esas tres palabras, corazón, verdad y amor, ponen en juego los principios de una comunicación humana, del hablar entre personas.

Bajo el título, “En tiempos de soledad, la comunicación une corazones”, los obispos desgranan esas tres palabras en su mensaje. Indican que “vivimos tiempos de desvinculación, de individualismos, de soledad”. La polarización, los extremos, las redes sociales están haciendo de la comunicación, del encuentro, una dificultad, cuando debería ser el primer objetivo entre las personas. Los obispos afirman que “la comunicación se realiza cuando genera vínculos con el otro, con la realidad y con la verdad”.

En este sentido, en el mensaje, hablan de la telebasura, que «ha sido exponente máximo de una comunicación orientada a los ratings de audiencia convertible en beneficio económico”. La Comisión apunta que este modelo, que parece que llega a su fin, “pasa por encima de la verdad, de la dignidad de las personas, de la inteligencia humana”. Y no solo está vigente en los medios de comunicación sino que tiene extensiones en la política, el deporte o las instituciones. Por ello, aseguran que “la comunicación con el corazón no es comunicación para la pasión que divide sino para la pasión que une, que vincula, para la compasión”.

Así, llegamos a la segunda palabra de la comunicación a la que invita el Papa, que es la  verdad“Sólo la comunicación de la verdad – matizan- permite avanzar la sociedad y es realmente comunicación”.

Y, además, los obispos hacen un llamamiento a todos los que participan en redes sociales, que muchas veces llevan a las fakes news y la incomunicación,  para «que tengan entre sus motivaciones hacer posible un encuentro y un diálogo que puedan iluminar mejor la verdad de las cosas y de las personas”.

En su mensaje, también hablan de la inteligencia artificial, que ha irrumpido en el mundo de la comunicación en los últimos meses. “Esta inteligencia artificial y sus limitaciones son una oportunidad para revalorizar la comunicación humana por lo que esta aporta de humanidad, de corazón, de amor y de verdad”. 

Los obispos de la Comisión explican la tercera palabra, que está en este eje de la comunicación que propone el Papa Francisco, que es: el amor. Porque «la comunicación en el amor, como contenido y como modo de comunicar, puede hacer mejor la vida de las personas”.

Finalmente, alientan a los comunicadores y a todos los cristianos, a realizar una comunicación con corazón, verdad y amor para crear una sociedad más humana y contribuir así al bien de la persona.