Cáritas diocesana de Ávila ha firmado este lunes un convenio de colaboración con la Universidad Católica “Santa Teresa de Jesús (UCAV) para favorecer la participación de miembros de la comunidad universitaria, en particular sus estudiantes, en el Programa de infancia, juventud y familia que gestiona la entidad social de la Iglesia abulense.
Antonio Luis Nicolás Marín (delegado episcopal de Cáritas Diocesana de Ávila) ha mostrado su agradecimiento a la UCAV, y ha declarado que esta firma “es un hito porque establece un fundamento en una entidad como la UCAV, en el que se pretende que el ser humano vaya creciendo en todos los aspectos de su vida”. Asimismo, se ha mostrado convencido de que el centro universitario dota de capacidad profesional, pero “la capacidad humana siempre la ha puesto de manifiesto en el primer eslabón en su cadena formativa”. Antonio Luis Nicolás ha recordado que Cáritas pretende no sólo paliar necesidades con carácter urgente, sino también generar en la sociedad ese sentido de pertenencia, de superación de situaciones, que la capacitación de cada uno se ponga al servicio de una sociedad plural y justa, y el mejor caldo de cultivo va a ser en la universidad”, ha afirmado.
El convenio persigue favorecer la participación de estudiantes en el Programa de infancia, que es lo que se ha realizado hasta ahora, así como ampliarlo a los programas de juventud y familia de Cáritas diocesana de Ávila, con la participación también de profesorado.
Durante el curso 19/21, alrededor de 30 alumnos colaboraron el programa de infancia de Cáritas, donde reciben formación para atender a niños y colaborar en lo que Cáritas les solicite, algo que la UCAV les reconoce académicamente.
Por su parte, la rectora de la UCAV, Mª del Rosario Sáez Yuguero, ha manifestado que esta firma materializa la colaboración que ambas instituciones ya mantenían en temas, principalmente, de voluntariado. Con este convenio “aportamos nuestro granito de arena como institución diocesana para colaborar no sólo en el voluntariado de los alumnos que es lo q hemos hecho hasta ahora, sino en más actividades con proyectos, profesorado y de todo lo que podamos aportar”. “Es el momento, como pide el Papa, de que obras sean amores y no buenas razones y que estemos poniendo a disposición de Cáritas el potencial que tenemos desde la universidad para el servicio de tantas personas necesitadas y con más necesidades que puedan sobrevenir”, ha reiterado la Rectora.