Es una de esas historias que pocos conocen, pero que, en honor a quienes se fueron en silencio, merece ser contada. Sucedió hace ahora seis meses, en el céntrico convento de las Madres Adoratrices, situado en la calle Duque de Alba. A mitad de marzo, con el país confinado por la pandemia, varias religiosas empiezan […]